“¿Toleramos el machismo si es musulmán?” En cierta manera, opino que sí, pero no nos engañemos, de igual manera que aún hoy seguimos tolerando el machismo que sigue existiendo en ciertas esferas de nuestro diario patrio, en ciertos ámbitos que nos son conocidos de una u otra forma y que nada tienen que ver con el mundo musulmán.
El Islam, por lo menos el Islam de las personas de esta religión que tengo el placer de conocer, no justifica el maltrato, mucho menos aboga por la inferioridad de la mujer. Hay otro Islam, uno que se da en las zonas rurales, en las periferias de los países de origen, ese que luego exportan a países occidentales, que necesita a todas luces una evolución con respecto al respeto hacia la mujer. Son los seguidores de este último los que suelen causar problemas aquí en España, jamás los del primero.
De vez en cuando aparecen noticias morbosas con respecto a sucesos con musulmanes en la prensa y quedamos muy sorprendidos, por supuesto con toda la razón. No viene mal de vez en cuando hacer un ejercicio memorístico y visualizar a esas mujeres españolas, máxime en ámbitos de lo rural, que estaban vetadas en las tabernas, esas “buenas cristianas” que iban a misa con un pañuelo cubriéndose la cabeza, esas completamente subyugadas al marido día y noche que se contaban por millones, esas de la ley del silencio de puertas para adentro, esas que no se les ocurriese ir a denunciar la menor agresión debido a que entonces la ración de palos sería doble o triple.
Si nosotros hemos tenido una evolución cultural con respecto al machismo, ¿por qué no habría de darse la misma poco a poco en el mundo islámico? Igual que nosotros como cultura hemos ido andando un camino en el cual hemos desterrado, o casi desterrado, viejas conductas harto perjudiciales para el género femenino, ¿por qué razón no hemos de confiar en que otras culturas vayan haciendo lo propio?
Soy especialmente optimista con el papel que jugará la mujer dentro del mundo islámico. Uno se da cuenta conforme comparte mesa y mantel con musulmanes que, a más formación, a más confort económico, siguen unos patrones de conducta más occidentalizados. Quiero incidir de nuevo en lo de a más formación, puesto que, cumpliéndose esto, menos practican su religión y, por supuesto, las mujeres juegan un papel igualitario con respecto al hombre.
Esta web utiliza 'cookies' propias y de terceros para ofrecerte una mejor experiencia y servicio. Al navegar o utilizar nuestros servicios, aceptas el uso que hacemos de las 'cookies'. Puedes cambiar la configuración de 'cookies' en cualquier momento. Aceptar
marzo 17th, 2012 at 23:03
“¿Toleramos el machismo si es musulmán?” En cierta manera, opino que sí, pero no nos engañemos, de igual manera que aún hoy seguimos tolerando el machismo que sigue existiendo en ciertas esferas de nuestro diario patrio, en ciertos ámbitos que nos son conocidos de una u otra forma y que nada tienen que ver con el mundo musulmán.
El Islam, por lo menos el Islam de las personas de esta religión que tengo el placer de conocer, no justifica el maltrato, mucho menos aboga por la inferioridad de la mujer. Hay otro Islam, uno que se da en las zonas rurales, en las periferias de los países de origen, ese que luego exportan a países occidentales, que necesita a todas luces una evolución con respecto al respeto hacia la mujer. Son los seguidores de este último los que suelen causar problemas aquí en España, jamás los del primero.
De vez en cuando aparecen noticias morbosas con respecto a sucesos con musulmanes en la prensa y quedamos muy sorprendidos, por supuesto con toda la razón. No viene mal de vez en cuando hacer un ejercicio memorístico y visualizar a esas mujeres españolas, máxime en ámbitos de lo rural, que estaban vetadas en las tabernas, esas “buenas cristianas” que iban a misa con un pañuelo cubriéndose la cabeza, esas completamente subyugadas al marido día y noche que se contaban por millones, esas de la ley del silencio de puertas para adentro, esas que no se les ocurriese ir a denunciar la menor agresión debido a que entonces la ración de palos sería doble o triple.
Si nosotros hemos tenido una evolución cultural con respecto al machismo, ¿por qué no habría de darse la misma poco a poco en el mundo islámico? Igual que nosotros como cultura hemos ido andando un camino en el cual hemos desterrado, o casi desterrado, viejas conductas harto perjudiciales para el género femenino, ¿por qué razón no hemos de confiar en que otras culturas vayan haciendo lo propio?
Soy especialmente optimista con el papel que jugará la mujer dentro del mundo islámico. Uno se da cuenta conforme comparte mesa y mantel con musulmanes que, a más formación, a más confort económico, siguen unos patrones de conducta más occidentalizados. Quiero incidir de nuevo en lo de a más formación, puesto que, cumpliéndose esto, menos practican su religión y, por supuesto, las mujeres juegan un papel igualitario con respecto al hombre.
Saludos.