Categorías | Actualidad

Prohibida una manifestación atea el Jueves Santo

Actualizado el 27 marzo 2012 por Justa

¿Derecho a manifestarse o provocación a los católicos?

Facebooktwittergoogle_pluslinkedin

Comentarios enviados (6)

  1. Pablo Herrera dice:

    Sin duda a los simpatizantes del 15-M se les va de las manos. Parece que la autoridad competente ha tenido el buen criterio de prohibir que, en una fecha tan señalada como es el jueves Santo para los cristianos, se realice una manifestación que, lejos de reflejar un sentimiento o pensamiento ideológico o religioso o, mejor dicho, antirreligioso, busca la alteración y provocación de aquellos que celebramos uno de los días grandes de nuestra Fe.

    Es curioso ver cómo los «indignados» se quejan de las cargas policiales pero, a día de hoy, siguen manteniendo tal manifestación aún estando expresamente prohibida. Si queremos que se respeten nuestros derechos, digo yo, debemos respetar los de los demás o, al menos, las normas del «juego».

    Ojalá los cristianos, en cualquier caso, no entremos en estas disputas absurdas y, defendiendo nuestras creencias y celebraciones, hagamos ver que la Iglesia, como comunidad creyente, no necesita de lecciones morales ni golpes de pecho de gente que se indigna por no sé muy bien porqué.

    Para juzgar ya estará otro, para los que creemos en Él.

    Pablo Herrera

  2. Mariano Zamora dice:

    No es el foro adecuado para hablar de política, pero…:¿Es incompatible ser simpatizante del 15-M y los indignados y ser católico? Interesante, hmmm……

  3. Justa dice:

    Yo creo que no es incompatible simpatizar con el 15-M y ser católico. Ningún movimiento o partido tiene la prerrogativa de expedir el marchamo de católico. Todo el mundo tiene derecho a manifestarse, pero respetando a los que gustan – gustamos – de vivir el Jueves Santo disfrutando de las procesiones. Lo contrario sería una provocación innecesaria. Además, no sé qué motivos hay para manifestarse en contra de una tradición tan arraigada, que traspasa lo religioso y es todo un fenómeno cultural, artístico, gastronómico…, único y de interés internacional.

  4. Agnès dice:

    Pienso que la Semana Santa ya ha dejado de ser en su totalidad una Semana Religiosa, ciertamente en los años que llevo (5 años disfrutando de esta actividad) y no por ello muchos de los que estamos somos religiosos. La Semana Santa ha llegado a ser un ícono cultural, es pura tradición llegando a ir mucho más allá de la religión.
    Disfruto del Cristo de la Buena Muerte, con la Marcha de los Legionarios, es impresionante, ¡todo un espectáculo!
    Considero que aquel que no esté de acuerdo, simplemente que no vaya a los sitios donde todos podemos disfrutar de las procesiones. Tenemos la libertad de elegir a dónde ir.
    Hay países en los cuales “obligan” a sus trabajadores(as) a ir a la Misa del Papa, en medio de la Plaza de la Revolución, sin ser siquiera religiosos, e incluso sin estar de acuerdo con el sistema y éstos no pueden libremente elegir a dónde ir.
    Pienso en los “Indignados”, que no juzgan a los religiosos; sino que arremeten contra todo lo que representa la Iglesia y todos sus “omnipotentes y omnipresentes representantes”.
    No sé hasta dónde llegaran los anti-católicos; nos estamos expandiendo cada día más, incluso por pueblos tradicionalmente católicos. No conozco todas las “leyendas negras” sobre la Iglesia y algunos de sus representantes, pero lo cierto es que, de tanto repetirlas, llegan a aceptarse, aunque, desde mi punto de vista, no es sano generalizar, y más cuando no se tienen fundamentos.

  5. maria jose dice:

    El fin de la manifestación atea no es ni cuanto menos provocar a los católicos,sino que el fundamento de la misma era reivindicar la autofinanciación de la misma (al igual que ocurre con el resto de Confesiones religiosas no católicas que no gozan de privilegios, como estar exentas de algunos impuestos, IBI por ejemplo) lo que supondría la revisión de los Acuerdos sobre Asuntos Económicos de 1979 del Estado español y la Santa Sede. Actualmente, nos encontramos en la tercera fase de este pacto en la que se establece que el Estado destinará para el sostenimiento de la Iglesia el 0´7 de la cuantía íntegra del IRPF (dándose la posibilidad al contribuyente de que marque o no la casilla correspondiente), y aquí la reivindicación de los laicos/ateos: la cuarta fase del acuerdo en el que la Iglesia declara su intención de obtener por sí misma recursos económicos, es decir, sustituir el sistema de financiación directa (0´7 del IRPF) por un sistema de fases escalonadas, financiándose aquélla con las prestaciones de los fieles, las colectas, limosnas y oblaciones.
    No hay más en esta reivindicación, no hay un sentimiento anti-religioso ni mucho menos, sino un sentimiento Laico, sentimiento muy distinto.

  6. Pablo Herrera dice:

    Sin duda, tiene su lógica el planteamiento que usted hace… si bien no debemos ser demagógicos a la hora de hablar de la Iglesia Católica ya que, debemos recordar, no es la única institución que recibe esos «privilegios» de los que habla. ¿Nos referimos a los partidos políticos? ¿Hablamos de las millonarias deudas tributarias de clubes de fútbol y sus «condonaciones» (siquiera encubiertas)? Debemos ser meridianamente serios al referirnos a la Iglesia, al menos, por respeto a aquellos que profesamos y creemos, no tanto en ella, como en el Dios que la encabeza y que voluntariamente marcamos la «X» a favor de esta entidad religiosa.
    Me da la sensación de que nuevamente confundimos la definición de igualdad y entendemos que igualdad es «café para todos», si bien no nos damos cuenta de la injusticia que esto puede suponer. Quizá sea más coherente pensar que esos «privilegios» a los que algunos se refieren son fruto de una larguísima tradición y cultura que, más le pese a quien le pese, sigue viva en España, así como en gran parte del mundo.
    Resulta egoísta, a mi parecer, observar cómo algunos sólo tiran piedras a la iglesia católica para airear el dinero que «recaudan», sin observar el bien que este movimiento repercute en la sociedad a través de sus múltiples instituciones como CARITAS interparroquial, entre muchísimas otras. Ojalá nuestro estado dedicara, no ya un 0,7 de nuestra aportación sino un 50% de ella a hacer tanto bien y ofrecer tanta atención a la persona individualmente.

Deja tu comentario

Advertise Here
Advertise Here

Sitios recomendados